Patio de sueños

EL pasado 5 de Julio estrenamos en Carcabuey un proyecto muy especial. Un documental sobre el cine de un pequeño pueblo, y de lo que fueron las personas que lo hicieron posible, entre ellas, mi propio padre.Mi vida ha estado ligada desde que tengo uso de razón(si lo he tenido alguna vez) al cine, a las películas, a las historias, a la fantasía, al arte de imaginar y escapar de la realidad mundana. Así que estrenamos el corto en el antiguo cine de verano de Carcabuey, donde mi padre era empresario y me subía en un taburete para que mirara por el ventanuco de donde salía el chorro de luz convertido en magia en la pantalla. Todos aquellos hombres y mujeres, hoy ya mayores, de todos los pueblos de toda España, hicieron posible los sueños en un país gris. El corto los homenajea y el estreno, con casi todos los que intervinieron, fue emotivo, más aún cuando estuvo completamente lleno de público. Gracias a todos los carcabulenses, a Antonio Osuna por su enorme apoyo, a Eloy, a todos los que ayudaron y también a la orquesta SYSO que puso el punto final mágico con las músicas de esas películas que siempre estarán ahí.

Carta de amor a Felipe el sexto

Me dice mi primo Basilio, que es anarquista, marxista, repúblicano y con coleta, que por qué me gusta Felipe el rey nuevo. Yo le digo que es alto, guapo y que está preparado. Mi primo dice que a él le parece un caradura, que vive a costa de nosotros y que nadie le ha votado. Yo le digo que se calle, que esta monarquía está limpita y la reina hasta presentaba telediarios. Él me dice, y ya te digo que es republicano y con pelo en el sobaco, que se ha paseado por Madrid con el Rolls Royce de Franco mientras la gente de la calle rebusca en los contenedores y no pueden pagar la hipoteca. Que muchos niños no tienen ni para comer y tienen que abrirle comedores, que su hija ,la infanta, va a cobrar 8000 euros al mes por comerse los mocos. Yo le digo que es un perverso, que no sabe que Felipe todavía se hace la cama y le echa tomate él mismo, personalmente, a la tostada.Él me dice que tenían que habernos preguntado si lo queremos, que nadie es vasallo de nadie, que las monarquias son medievales. Al final voy a dejar de hablarme con él.Me voy a ver Tele 5, a ver bien el vestido de Letizia. Perdón, de la reina de España.

Aires nuevos, aires rancios.

Es un tiempo de cambio, sin duda, y también una oportunidad. Nunca en la democracia reciente habían ocurrido estos hechos: El fin del bipartidismo y la abdicación de un rey.Y tienen mucho que ver porque las ideas que defiende este chico de la coleta son claras, razonables y en cierto modo, difíciles de cumplir y no porque sean excesivamente ideales sino porque los políticos actuales, acomodados en su poltrona de poder y ceguera, teniendo a buena parte de los medios de su lado, lo querrán impedir a toda costa, ya que, de producirse, sería el fin de su chollo, de ese chollo que es culpable de buena parte de los problemas de este país. Ese esclavismo del poder económico, esa falta de empatía con la gente que sufre, esa corrupción que los corroe. Y que oportunidad para que se acabe ya esta absurda monarquía, sustentada en unas leyes medievales, que vulneran los derechos mas elementales, sobre todo el de igualdad de todas las personas. Al menos que haya un referendum. Que oportunidad para que hagan las maletas y se pongan a trabajar como el que más.Pero me temo que la tele se deshará en elogios. Que si el 23f, que si la transición. Nada de elefantes ni una vida de lujo a costa del pueblo.

Mujica

El sentido común, el menos común de los sentidos es lo que detecto viendo al presidente de Urugay, Mujica, en una entrevista en Salvados. A pesar de ser presidente de la república, vive en su cortijo, dona casi todo su sueldo, pasa de protocolos y es sobrio, sincero y coherente.
Nos llama la atención que un político sea asi, viendo la cantidad de miserables que abundan por nuestros lares.Nos choca su aplastante lógica, su humanidad, su crítica al consumo y a los mercados, su peste por la asquerosa política capitalista que domina Europa. La semana que viene votaremos y me da la impresión que nada o poco va a cambiar, que la ceguera continúa, que la inercia del capital y el atontamiento general es tan grande que no vamos a confiar en quitar a esos dos enormes partidos corruptos. Lástima. Nos hacen falta Mujicas.