Mañana nos atracan, nos bajan los calzones, nos hacen mas pobres, nos dejan por tontos. Cuando a este gobierno de prepotentes, inútiles, mentirosos e insensibles con el sentir de la gente, se le llenen las arcas de nuestro dinero sudado a golpe de IVA, poco o nada habrá cambiado. La crisis seguirá y aumentará, y quedará, una vez más, esa sensación de que hacer ante tamaña cantidad de barbaridades contra el pueblo. Poco les importa subir los materiales mas necesarios para el cole, ni cargarse el cine o el teatro, ni que nos sigan machacando con las facturas de la luz, el agua y los bandoleros de las compañías telefónicas, frotando sus manos ante la creciente ola de tecnología imbécil que nos abruma y nos hace más inútiles. Tampoco les importa cargarse la sanidad y dejar agónicos a los enfermos crónicos. Verlo para creerlo. Es difícil pensar que no haya un cambio de mentalidad tras estos años de penuria.Que no nos demos cuenta de la ineficacia de la clase política, de que hay que tomar medidas a golpe de calle y dejar de estar todo el día con el Ipad, Ipod, Wasap, twitter o la madre que los parió. Este abuso requiere calle, constancia y mucha decisión. La pasividad, más que nunca, significa pobreza. A ver quien da la señal de salida.
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